Nuestro principal producto es el Cortacírculos con guardapolvo de seguridad que es la herramienta perfecta, tanto para los instaladores profesionales como para los aficionados al bricolaje. El cortacírculos se utiliza para la realización de agujeros circulares y ojos de buey en techos de escayola, techos desmontables, techos aislantes y en todo tipo de materiales “blandos” tipo pladur, madera, yeso…
Está indicado, entre otros trabajos, en la colocación de altavoces y de focos con lámparas halógenas y downlights ya que posee sierras circulares de varios diámetros que abarcan la mayor parte de las medidas de este tipo de luminarias empotrables. El eje es compatible con coronas circulares roscadas a 5/8″.
Se complementa con un protector que recoge todo el polvo y los residuos que se generan en el corte, ejecutado un trabajo limpio y seguro, en el que no es necesario el uso de gafas ni otros elementos de seguridad .
Modelo G-150 compuesto por:
- Broca-guía
- Llave hexagonal
- Eje porta sierras (5 elementos) al que se le pueden adaptar coronas circulares profesionales roscadas a 5/8″
- Disco con 6 ranuras y 6 sierras circulares de 60-68-74-80-90-100 mm. de diámetro
- Guardapolvo de 150 mm. de diámetro, con rodamiento.
Se venden en cajas completas formando un kit
Ventajas:
- Máxima seguridad para el instalador ya que no caen residuos y no tiene que protegerse los ojos
- No mancha ni deja marcas porque el guardapolvo se mantiene fijado al techo y no gira
- Mayor precisión en el corte ya que el instalador realiza el trabajo desde una posición idónea
- Al ser flexible, se visualiza dónde poner la broca para hacer el primer taladro.
- El círculo se extrae de la sierra o de la corona circular con mucha facilidad con el uso de un destornillador
Instrucciones de uso:
Una vez hecho el primer agujero con la broca, presionar suavemente hacia arriba para iniciar el corte con la sierra.
Realizado el círculo, mantener el guardapolvo pegado al techo al menos durante 5 segundos para que se deposite todo el polvo producido en el corte.
